No dejen de comunicarse y continúen conectados, incluso cuando la discusión se torne desagradable. Dejar los problemas colgando y practicar la política del avestruz, causará más problemas al matrimonio.
Las parejas que mantienen su apertura emocional y están disponibles el uno para el otro, son las que duran más y mantienen sus niveles de satisfacción más altos.
Están presentes cuando son necesitados, prestan atención a lo que dice el ser amado, hablan con la verdad sin echar culpas, no juzgan, ni mucho menos condenan. Y son flexibles en cuanto a los resultados de las negociaciones.
Si tu pareja se siente cómoda trayendo a la discusión sus preocupaciones, frustraciones, necesidades no satisfechas, desilusiones y hasta resentimientos, y tú la escuchas con compasión, sin atacarla como forma de defensa, tienes el futuro de la relación asegurado.
Ejercicio para el matrimonio
Te invito a marcar con una X todas las variables negativas que practicas con regularidad y con una V las positivas. Luego compara cuántas tienes de cada tipo.
_ Te distraes con facilidad cuando el otro habla o _ le brindas tu atención concentrada.
_ Te interesa poco lo que te cuenta o _ muestras genuina curiosidad e interés.
_ Tienes un temperamento impaciente o _ practicas la paciencia cuando tu pareja dice o hace algo que no te agrada.
_ Sueles mostrarte distante desde el punto de vista afectivo o _ eres una persona muy afectuosa.
Te caracterizas por ser:
_ Rencoroso o _ predispuesto a perdonar
_ Impredecible o _ consistente
_ Independiente o _ comprometido con la relación
_ Inasequible o _ receptivo
Las frases o palabras que aparecen en primer lugar son las que mantienen a tu pareja alejada de ti, aunque no sea esa su intención. Son mecanismos de defensa que te impiden conectar con el otro y comunicarte íntimamente.
La dinámica de la relación puede y debe ser modificada para bien, en cuanto la persona evasiva toma conciencia del patrón que reproduce y que llevará su relación al fracaso, de no ser modificado.
La mayor parte de las veces es importante que acudan a terapia de pareja, para que el diagnóstico de por qué llegaron a ese estado sea más acertado y preciso y se planteen vías de solución viables para el cambio a mediano plazo.
¿No dejen de comunicarse y continúen conectados?
Sí, parece muy sencillo en teoría, pero no lo es tanto en la práctica. Y es hora de hacer algo. Antes de que sea demasiado tarde.